Investigadores de la Universidad Pública Vasca han analizado el proyecto de Tren de Altas Prestaciones (TAV) vasco, la conocida como Y-Vasca, y concluyen que su rentabilidad será nula y NO disminuirá las emisiones de CO2 a la atmósfera!! (entre otras razones que conocerás a continuación). Por lo tanto, ellos y ellas también nos están diciendo que ¡El TAV nos mata!! (el medio ambiente, la economía…).
Vas a poder conocer en directo este informe de la boca de uno de sus autores, David Hoyos. Será este lunes 27 de marzo, a las 19:00 de la tarde, en la sala de conferencias del 2º piso del Civivox Condestable (Calle Mayor 2, Iruñea).
Sustrai Erakuntza hará una pequeña introducción sobre la situación del TAV navarro. También intervendrán brevemente representantes de los sindicatos ELA y LAB, que han sido los impulsores del informe.
Y a continuación os dejamos con el resumen del informe realizado por el sindicado ELA. Al final también encontrarás enlaces desde donde descargar el informe completo, y más información realizada por LAB y ELA.
Resumen del informe:
En el informe se señala que la evidencia es suficiente para afirmar que, dejando de lado el coste de la inversión, que es irrecuperable, es prácticamente imposible conseguir beneficios de explotación sin ayuda de subsidios públicos, dado el alto coste de funcionamiento y mantenimiento de la infraestructura. En el caso de que el Gobierno vasco asuma la explotación del servicio intercity entre las capitales vascas, el déficit anual de explotación supondrá que el contribuyente, no sólo no recuperará nunca la inversión realizada, deberá aportar anualmente alrededor de 40 millones de euros para su funcionamiento.
Para Ekopol, el servicio de alta velocidad es caro y por tanto, sólo asequible para personas de renta elevada. La evidencia disponible muestra que una línea que no es capaz de cubrir sus costes de explotación, como prevemos en el caso de la Y vasca, supone una transferencia via impuestos de la capas más pobres a las más ricas de la sociedad. En otras palabras, las instituciones públicas están promoviendo inversiones que favorecen aún más a las rentas altas y con ello, contribuyen a aumentar la brecha social entre ricos y pobres.
En lo que se refiere al análisis ambiental, señalan que la inversión en alta velocidad ferroviaria no debería ser vendida a los ciudadanos como una política verde. Si bien es importante destacar la multitud de dimensiones ambientales afectadas por la construcción de la Y vasca (fragmentación de hábitat, biodiversidad, ocupación de suelo fértil, impacto visual y paisajístico, ruido, vibraciones, etc.), el informe concluye que, incluso en escenarios optimistas de demanda mixta de pasajeros y mercancías, la Y vasca no lograría ahorrar emisiones de CO2 antes de 100 años, ni ahorrar energía antes de 55 años.
Más información en los siguientes enlaces:
La Y griega vasca: Un callejón sin salida (Fundación Manu Robles-Arangiz Institutua)
Ainhoa Etxaide: «No es cierto que el TAV sea un proyecto que no se pueda echar atrás; no está hecho» (LAB)