La fundación Sustrai Erakuntza ha tenido conocimiento por múltiples vías de la noticia del cierre de taquillas de venta de billetes en estaciones navarras. Tafalla aparecía en el listado que informaba del cierre de mas de un centenar taquillas en todo el Estado. Y en el caso de Castejón y Altsasu, lo hemos conocido en las propias estaciones.
De este modo, en Navarra se unen dos hechos de gran relevancia. Por una parte las obras del Tren de Alta Velocidad avanzan a gran velocidad, con un gran dispendio económico y destrucción ecológica. Y por la otra, se consuma la desaparición de servicios asociados al único modo de transporte completamente sostenible.
En el caso del Tren de Alta Velocidad, el aumento de las obras deja una marca de destrucción del territorio en Navarra de sur a norte. En estos momento se están llevando a cabo obras para la construcción de esta infraestructura como no se habían realizado nunca en Navarra. Ni en tiempos de bonanza económica, ni cuando gobernaba las fuerzas mas proclives a la misma, se han construido tantos kilómetros de la plataforma sobre la que pretenden instalar las vías del TAV. Ahora mismo están en marcha obras en dos tramos de unos 15 km cada uno, entre Villafranca y Tafalla. ¡¡ Mas de 30 kilómetros, lo nunca visto en Navarra !!
Pero además, hemos iniciado el año nuevo con otra mala noticia, que ya había sido anunciada en varias ocasiones, pero que aun así nos llena de desesperación. Según informaba el primer día del año la Cadena Ser, en el Estado Español se cerraban ese día mas de un centenar de estaciones de tren. Dejaban de tener servicio de venta de billetes, pero en realidad con ello perdían otros muchos servicios que el personal que los vendía realiza a la vez: información, vigilancia, cuidado… Y según esa noticia, en Navarra se cerraría la estación de Tafalla.
Sin embargo, echado a andar ya el año nuevo, vemos que el de Tafalla no es el único caso en Navarra. Porque, tras acudir a las estaciones, hemos podido confirmar que también se han cerrado en la misma fecha las taquillas de las estaciones de Altsasu/Alsasua y Castejón de Ebro.
De este modo, vemos que en Navarra ya solo quedan servicios a los pasajeros en las estaciones de Pamplona/Iruñea y Tudela. Se avanza un paso mas en el desmantelamiento del ferrocarril convencional, en el tren rural que sirve para la vertebración de las comarcas por las que pasa. Y decimos que aun vertebra, porque si, de momento el tren de cercanías en Navarra para en una docena de estaciones de Navarra. Pero nos tememos que este cierre de taquillas pueda ser el inicio del desmantelamiento del propio tren, de la desaparición de los últimos vestigios de los cercanías en Navarra.
Nos encontraríamos así con la desaparición del único medio de transporte motorizado que puede ser efectuado de una manera eficiente con energías renovables. El tren que disponemos en Navarra, y que está siendo desmantelado, es la única solución viable para un transporte de personas y mercancías que no emita gases de efecto invernadero, ni provoque un gran destrozo en los ecosistemas. Y es precisamente este medio de transporte el que los diferentes gobiernos y poderes públicos y privados están haciendo desaparecer. En lugar de aumentar los servicios, aumentar las frecuencias de paso, y conseguir nuevas rutas, la tendencia es la contraría, la del cierre progresivo del tren rural. Justo lo contrario de lo que necesitamos en este contexto de Emergencia Climática.
Por lo tanto, no podemos mas que volver a levantar la voz, para exigir la paralización de las obras de ese TAV que destroza nuestro medio ambiente, nuestra economía, y acaba además con los medios de transporte sostenibles de que disponemos.
Y hoy mas que nunca, llamamos a la ciudadanía a que se movilice para evitar la desaparición del tren convencional en Navarra, por ejemplo en la concentración que vecin@s de Castejón van a realizar este domingo 5 a las 12:00 en la propia estación. Porque es el único medio de transporte con el que podríamos contar de una manera realista en ese futuro sin emisiones contaminantes al que tenemos que ir. Por el mantenimiento del mundo rural, por un transporte sostenible, y contra el destrozo del Tren de Alta Velocidad, NO A LA DESAPARICIÓN DE SERVICIOS FERROVIARIOS.